Este es el lugar ideal. Si aún no tienes Eslovenia en tu mente, en tu radar o en tu lista de destinos ciclistas, es hora de cambiarlo. Porque este pequeño país ciclista está pasando rápidamente de ser un secreto para los amantes de la bicicleta de montaña a convertirse en un destino con potencial de culto. Con mucha naturaleza virgen, un encanto muy particular, dulces tentaciones y algunas sorpresas, como el ciclismo subterráneo. Un país pequeño, pero ¡tan bonito para recorrer en bicicleta!






