FIEBRE DEL TOUR DE FRANCIA – CHOQUE DE TITANES

Mientras tanto, Pogačar se convirtió en una estrella en la Lieja-Bastogne-Lieja y se hizo con el Giro de Italia de forma merckxiana, hasta el punto de parecer que pedaleaba con el freno de mano puesto. Fue como si se llevara a todos a casa en modo ahorro/entrenamiento y da la impresión de que este Giro no le desgastó en absoluto, al contrario, le hizo mucho mejor. Inmediatamente surge la pregunta de quién le está haciendo qué.

Pero, ¿es apropiada esta pregunta? Al fin y al cabo, estamos hablando del maillot amarillo del Tour de Francia, la carrera más reñida del año, en la que en cada edición siempre ocurre algo que no esperamos. La batalla por el maillot en cuestión será dura como una roca y muy diferente a la del Giro de Italia, donde la competencia -con todos mis respetos a la actuación de Pogačar- fue bastante pobre de todos modos. Sopesamos las posibilidades de los favoritos para la victoria final.

Dos grandes favoritos + dos aspirantes reales y algunos favoritos en la sombra

Tadej Pogačar

El esloveno perdió las dos últimas ediciones del Tour ante el danés Jonas Vingegaard. Así que, en realidad, Tadej Pogačar debería ser el segundo en la jerarquía de favoritos. Sin embargo, cualquiera que le haya visto a lo largo de la temporada y especialmente en el Giro sabe de sobra que está mucho mejor que los dos años anteriores. Además, su equipo también es más fuerte que nunca. ¿O qué tal un equipo con Tadej Pogačar, Juan Ayuso, Joao Almeida, Adam Yates, Pavel Sivakov, Marc Soler, Nils Politt y Tim Wellens?
Escribimos en la revista Cyclelive nº 78 a principios de junio que Pogačar es, a grandes rasgos, el favorito número uno para nosotros.

El hecho de que Pogi nos dijera hace unos días que nunca se había sentido mejor sobre la bicicleta viene a sumarse a esta afirmación. Un juego mental que ya parece haberse decantado a su favor, porque no sólo estas palabras, sino sin duda también sus piernas ya han sembrado dudas mentales entre sus competidores en los últimos meses.

Jonas Vingegaard

Si nos hubieran preguntado a finales de marzo quién era el máximo favorito para este Tour, habríamos puesto a Vingegaard en el primer puesto. Al igual que todo su equipo al comienzo de la temporada, parecía incluso más fuerte que en 2023.
La temporada de Vingegaard comenzó cuando dominó la carrera por etapas española O Gran Camiño de principio a fin a finales de febrero, ganando tres de las cuatro etapas y la clasificación general como hizo en 2023.

También en la Tirreno-Adriático, demostró sus maravillosas piernas al ganar la quinta etapa con un ataque en solitario. El danés se escapó en la parte más empinada del San Giacamo, a 29 kilómetros de la meta. Ganó la etapa con más de un minuto de ventaja. Más tarde, ganó también la etapa de Monte Petrano, en la carrera por etapas italiana, con 1’24” de ventaja.

Cuando el estadounidense Matteo Jorgenson, venció a Remco Evenepoel en la París-Niza y su equipo también monopolizó las primeras carreras de un día, llegamos a pensar que también eran más fuertes en anchura que el año anterior. Hasta que los corredores del Visma – Lease a Bike empezaron de repente a pedalear de contratiempo en contratiempo y Vingegaard también tuvo una aparatosa caída con consecuencias nefastas en la Vuelta al País Vasco. Justo antes del inicio del Tour, parece que la rehabilitación tanto de Vingegaard como de Wout van Aert ha ido bien. Ambos estarán en la salida de este Tour, pero hasta qué punto serán realmente buenos sigue siendo una quimera. Que la niebla se esparza desde el entorno también forma parte del juego, sin duda. Sin embargo, incluso con “muy buena forma”, poco se puede hacer contra un “super Pogi”. No un muy bueno, sino un SU-PER Vingegaard, podría ser suficiente para vencer al esloveno. ¿Podrá Jonas encontrar a tiempo sus piernas alienígenas del Tour y será alienígena contra alienígena y duro contra duro? Eso esperamos.